domingo, 1 de mayo de 2011

“INSTRUCCIONES PARA LEER EN VOZ ALTA"

 “en la literatura encontramos la excusa
para hablar de las cosas que nos suceden”.
Orlando Van Bredam
  • Elegir los libros que se van a leer.
  • Leer con anterioridad.
  • Tener un ambiente adecuado.
  • Dejarse afectar y transformar.
  • Disfrazarse si se siente.
  • Encender una vela para que nos ilumine y acompañe.
  • Sentir la lectura.
  • Apropiarse de la lectura. 
  • Hacer una buena entonación.
  • Manejar diferentes tonos de voz.
  • Representar los cuentos más significativos.
  • Invitar a otros profesores, estudiantes y empleados de la institución al salón, para que nos escuchen y escucharlos.
  • Crear relaciones significativas con el niño y el adulto.
    Luis María Pescceti, propone juegos de lectura en voz alta, pues estos ayudan a desinhibirse, ganar confianza y  permitir que los niños descubran que no hay una sola manera de leer bien en voz alta, sino muchas, muy diferentes: maneras dramáticas, perezosas, divertidas, emocionantes, solitarias, tímidas, en fin…de ponerlas en práctica, de eso se trata[1].
¿POR QUÉ EL MAESTRO DEBE SER QUIEN LEA EN VOZ ALTA EN EL AULA?
El maestro es un ejemplo a seguir para los niños y niñas, motivo por el cual al leer en voz alta:
  • los motiva.
  • genera confianza.
  • Tranquilidad.
  • comparten vivencias.
  • acogen la voz.
  • invita a apropiarse del poder leer no como un ejercicio sino como un juego.
  • se da un contacto afectivo.
  • genera sensibilidad y curiosidad.
  • Los ayuda a comparar distintas entonaciones.
     De igual manera como lo dice Aidan Chambers: no nos gusta leer pero nos gusta escuchar, la narración de cuentos es indispensable para ayudar a las personas a convertirse en lectores literarios, pues esta práctica nos ofrece placer y satisfacción, se hace permeable, nos posibilita compartir, des-encasillarnos de lo tradicional, intervenir otros espacios, genera reconocimiento, da claridad y Desarrolla la capacidad de atención del niño.
    Al realizar la actividad de lectura en voz alta, nos dimos cuenta que con esta idea también se incentiva la corporalidad, en diferentes espacios y momentos, con diferentes personas, actividades y conocimientos como mediadoras, a partir del autoconocimiento y con ello se hace un verdadero aporte a mejorar las relaciones humanas que se tejen en el aula de clase y en la escuela.  




      Los niños y niñas se mostraron muy dinámicos, participativos, a uno que otro se le agudizo la voz, otros leían muy pausadamente, otros muy rápido, y otros muy tranquilos. 

    A partir de la lectura en voz alta del libro Franklin Dice Te Quiero, escrito por  Paulette Bourgeois e ilustraciones de Brenda Clark, que habla del cumpleaños de la mamá de Franklin y el regalo que él le dará, surgió la idea de realizar a nuestras mamas una tarjeta con un mensaje, aprovechando que ya se acerca el día de la madre y de igual manera ensayar la siguiente canción:
A TI MAMÁ.
A ti mamá, que te quiero y te quiero tanto y tanto,
A ti mamá, por ser tan especial quisiera darte un regalo,
Voy a subir al cielo montado en globos multicolores,
Para bajar la luna y dártela la envuelta en muchas flores,
Como la luna y tú no hay ninguna,
Como la luna y tú no hay ninguna,
Como la luna y tú no hay ninguna,
No hay tu como la luna,
No hay tu como la luna.
Fue una actividad muy bonita y enriquecedora nos divertimos pero también aprendimos.



[1] Juegos de lectura en voz alta, de Luis María Pescceti.


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